He aparecido en las siguientes películas: Los impostores, Confesiones de una mente peligrosa, La milla verde y Héroes fuera de órbita.
Robbie Stamp: ¿Cómo se crea para la pantalla un personaje tan desmadrado como Zaphod?
Sam Rockwell: Corra usted! Vaya usted corriendo a su casa!. Acaban de encontrar asesinada a su… mujer.
RS: Pero sigue siendo un político ¿no?
SR: Apresure el paso, por Dios, No sabe usted la desgracia tan horrible que le espera!
RS:¿Qué me dices de Zaphod y el sexo? Recuerdo al Zaphod original, Mark Wing-Davey, hablando de eso.
SR: No va muy rápido, que digamos.
RS: hay muchas especies ahí afuera.
SR: Evelina, Polidoro. Ni su hija ni su hijo contestan, amigo.
RS: Has trabajado realmente duro con muchos de los atributos físicos, cosas como el vestuario y la pistola.
SR: Espera… espera… Verás; mamá me había negado cinco luises… y entonces yo… te juro que lo hice sin querer…
RS: ¿Eso fue idea tuya?
SR: Le dije: Luisa, han asesinado a mamá! Me la he encontrado muerta en el estudio de papá.
RS: ¿Cómo es eso? Mereces un castigo peor que ese otro irrisorio.
SR: Si quieres que me castigue por mi propia mano, y enseguida, es muy fácil. Mi suicidio se atribuiría lógicamente a la desesperación que me causó ese accidente que acabas de inventar para salvarme. Pero este suicidio, al cual estoy dispuesto, ¿será bastante castigo para el crimen tan horrible que he cometido? No, no creas que califico así mi falta para invocar tu perdón, padre mío. Yo mismo no puedo explicar el verdadero impulso, esa especie de furor inconsciente de que tú hablabas en esa carta. Y, sin embargo…
RS: Y, sin embargo, tú querrías a tu madre.
SR: …¡Dame cinco luises!
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